Una de las industrias tradicionales de San Francisco del Rincón, es la del sombrero. Su origen se remonta a la segunda mitad del siglo dieciocho, pues hay evidencia documental de que en mil setecientos sesenta y seis, ya se practicaba esta actividad. Dos de los primeros sombrereros de San Francisco son Juan Isidoro de los Dolores y Zárate, quien además fue gobernador indígena del pueblo, y Joaquín León.
Otro dato importante sobre la evolución de la industria del sombrero en San Francisco lo constituye un censo levantado en 1851, donde cerca del 50 por ciento de la población económicamente activa se dedicaba a esta actividad, concentrándose en el centro de la población, así como en los barrios del Potrero, La cebolleta, San Miguel, Del Río y de Guadalupe. Esta actividad, aunque en menor escala, se desarrollaba también en algunas haciendas como la de Sauz de Armenta y el Mezquitillo.
En la actualidad, la industria del sombrero ya no es preponderante en el Municipio de San Francisco del Rincón, pues ha sido desplazada por la del calzado, pero sigue siendo una actividad económica de capital importancia, siendo esta industria autosuficiente puesto que aquí se fabrican hormas, prensas, telas, adornos, pinturas y barnices utilizados en la actividad. Ahora la materia prima ya no es la palma, sino la lona y el plástico, importándose campanas de Ecuador, China, Taiwán y Japón. Mucha de esta producción se exporta a Estados Unidos, Centro y Sudamérica.
Partes de los Sombreros
Un sombrero, es una prenda de vestir que se utiliza para cubrir la cabeza. Los sombreros, se diferencian de las gorras pues los primeros son más elaborados, tienen una corona alta y son más largos. Un sombrero, puede ser colocado encima de la cabeza o, en los casos de algunos sombreros para mujeres, ser asegurados al cabello con unas pinzas.
Los sombreros pueden ser fabricados, con una gran variedad de materiales, incluyendo lana, piel, fieltro, cuero y paja. Comúnmente, las partes que componen a un sombrero son las siguientes:
Corona
La porción del sombrero que cubre la parte superior de la cabeza.
Borde
La proyección, de un material tieso que recorre horizontalmente toda la circunferencia de un sombrero.
Banda suave
La parte interna del sombrero, aquella que toca directamente el cuerpo de quien usa el sombrero.
Banda del sombrero
Material que se encuentra entre la corona y el borde y sirve para darle forma al sombrero.
Visera
Proyección, de material tieso en el frente de algunos sombreros que sirve para dar sombra a los ojos.
Los sombreros, se usan para precaverse del sol o del frío. Los campesinos, no pueden prescindir de ellos; los alpinistas, tampoco. No son meros objetos frívolos, decorativos o ridículos. Se usan también o se usaron para saludar, para halagar, para molestar.
Sombreros de Paja Toquilla
Los sombreros se fabricaron primero en el siglo dieciséis. Se nombraron en el siglo diecisiete cuando EE.UU. ordenó cincuenta mil sombreros del gobierno de Ecuador, cuando las fuerzas de EE.UU. fueron a Panamá para pelear contra Colombia en la guerra de independencia panameña. Hoy, se llaman “Panamá Hats”
Después de la guerra llegaron a ser populares con la gente que trabajaba en el Canal de Panamá.
Fabricación
• Los sombreros se tejen cuidadosamente de la palma toquilla.
• Para fabricar un sombrero, alguien empieza haciendo el centro del sombrero.
• Entonces, lo pone alrededor de una caja circular y sigue tejiendo.
• El proceso de fabricar un sombrero puede durar 5 meses para un “Montecristi” de mejor calidad.
• Pero, hoy en día muchos son fabricados por maquina en Cuenca, Ecuador.
Industria
Tres cuartas partes de la producción del sombrero, se fabrican en las provincias de Azuay y Cañar en Ecuador; los de mejor calidad y renombre se fabrican en Montecristi y Jipijapa. Los principales, países de destino de sus exportaciones son Brasil, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, México, Italia, Colombia y Japón.
No se conoce el número de artesanos dedicados a este tipo de artesanía, aunque se estima que hay más de dos millones de personas que se dedican al sector artesanal en general.
Como Cuidar el Sombrero
Limpieza a Seco. Utilice un cepillo de cerda firme. Haga el barrido únicamente en sentido contrario a las agujas del reloj tanto en la copa como en el ala.
No Planchar. No es posible planchar el sombrero con sistemas caseros.
No exponer a temperaturas superiores a 50º C. Las temperaturas, excesivas contraen algunos de los materiales con los que se construyen los sombreros, por lo tanto no deberá colocarlos en lunetas de automóvil ni sobre fuentes de calor. En caso de mojarse, dejar escurrir a temperatura ambiente verificando que conserve su forma original.
No debe colocarse objetos pesados sobre la superficie del sombrero, tampoco se lo debe doblar con mucha fuerza, como si fuese un papel. Para remover pequeñas arrugas o repasar la forma del sombrero, coloque un pedazo de tela húmeda sobre el sombrero y luego plánchelo a temperatura moderada, o modélelo con sus manos. Si desea conservar perfectamente la forma original de su sombrero, es mejor evitar doblarlo o enrollarlo.
La "Paja Toquilla", material del que esta hecho su sombrero, mantiene mucho mejor su flexibilidad natural, mientras no se seque por completo, evítelo y su sombrero se conservará por más tiempo. Guarde, su sombrero en una habitación común grado de humedad relativamente alto, como un baño o una bodega. No es recomendable, utilizar su sombrero bajo condiciones lluviosas, podría perder su forma. Para limpiar su sombrero de manchas secas, use un pedazo de tela suave y jabón suave.
Los Primeros Sombreros
Sombrero Masculino
En España en el siglo dieciséis, el sombrero masculino, aplastado hasta más o menos mil quinientos ochenta, se adaptó a partir de entonces a las altas formas italianas, aunque otro autor dice que a partir de la cuarta década del dicho siglo el cambio de peinado impuso el de sombrero; se popularizó el grande de fieltro, de anchas alas y larga pluma flotando, en 1630, comienzo de la moda universal francesa.
Hasta mediados del siglo XVII, los caballeros siempre se mantenían con el sombrero puesto, inclusive en su cuarto y en presencia de damas; posteriormente se lo quitaban y agitaban al saludar. Con peluca no se ponía sombrero, sino que se llevaba debajo del brazo. Hacia 1660, apareció en Francia el sombrero de tres picos con plumas y galones de oro, que fue sustituido, a partir de la revolución, por el redondo y liso, llamado también bolero, que usó Simón Bolívar en París.
Hacia la época de las guerras de Independencia hispanoamericana, y más a partir de la reconquista, se conocieron en España el sombrero de anchas alas llamado bolívar y el de copa alta, denominado morillo, por los dos principales contendores. Miembros de la burocracia y los de la alta clase social en América estarían más al tanto de la evolución de los modelos de sombreros, que la clase de los estantes, o sea, los que no tenían la categoría de vecinos.
Sombreros de Fieltro
Para la fabricación del fieltro, se emplea, generalmente, pelo de conejo doméstico o salvaje, de liebre y de castor, convenientemente seleccionado y mezclado en una máquina soplona. El pelo así mezclado, unido a veces con otras fibras, se pesa para formar unidades; después pasa a una máquina de apelmazar, que aspira el pelo y, a través de un juego de tambores y aspas dotados de un movimiento giratorio vertiginoso, lo proyecta sobre un cono metálico con perforaciones muy finas, provisto de un aspirador, capaz de mantener el pelo sólidamente unido al mismo cono.
Distribuido de una manera uniforme sobre el cono giratorio, se lanza contra el pelo un chorro de agua caliente para peinarlo; la lámina así obtenida, llamada Bastido, se introduce posteriormente en las máquinas de abatanar y alisar, operaciones que dan al fieltro una primera consistencia. Después, de esta operación, el bastido pasa a las máquinas de enfurtir que, en distintas fases, reducen el fieltro a un estado más compacto y resistente; en este momento se obtiene el verdadero fieltro, dispuesto ya para las operaciones siguientes de tinte y acabado.
A esta etapa de la elaboración sigue, por lo general, el teñido del sombrero. Mediante su ebullición en un baño de colorante con mecanismos apropiados para que el color penetre profundamente en el fieltro. Los sombreros, teñidos pasan sucesivamente al modelado, a la prensa, al planchado y al acabado final, para recibir después solamente los últimos toques y el adorno. La elaboración de un sombrero de fieltro, precisa un total de sesenta operaciones. Otra materia, que se suele emplear para la fabricación de sombreros de fieltro es la lana, más fácil de trabajar que el pelo.
Sombreros para Hombres
Por lo general fabricados con pelo de castor, de cuyas pieles tenían prácticamente el monopolio los franceses del Canadá. Las principales fábricas estaban en La rochela, y fueron destruidas cuando la ciudad fue tomada por razones religiosas, según órdenes del cardenal Richelieu.
A Venezuela, se empezaron a importar los sombreros de betún y fieltro desde Nueva España, hacia la segunda mitad del siglo XVIII. También, se hacían en la actual Bolivia, con vicuña sola o intercalada con lana de oveja. El conde de Campomanes se quejaba de que no se llevara a España lana de alpaca suficiente para mezclar con la de vicuña para sombreros, industria privativa de la Península. Al parecer, las poblaciones indígenas, mestizas y mulatas adoptaron el uso del sombrero, en una época difícil de concretar pero que no pudo ser anterior a la segunda mitad del siglo XVI. Sombreros de modelo español, se usaban por unos pocos indios, sobre todo caciques.
Como por la escasa capacidad adquisitiva no todos los indios podían procurarse los sombreros importados de Europa o los fabricados en los obrajes americanos, así como tampoco por causa de las interdicciones para usar en un todo la ropa de los dominadores, parece que se derivó hacia la confección de distintos tipos de sombreros de materiales vegetales. Esto abarataba, para los encomenderos la obligación de suministrar sombreros a sus peones, y hasta puede pensarse que aquellos indujeron a los asalariados a confeccionar la prenda, para liberarse parcialmente de un gravamen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario